Hoy es un día especial, como muchos tantos. Y a la vez es único, como ninguno lo ha sido. Hoy hace cuatro años y un mes que comenzó nuestra mágica historia, mi ángel de amor, mi ángel de luz. Hoy un mes más nos unirá con más fuerza.
Hace apenas dos semanas que te fuiste, pero los recuerdos y los momentos que has dejado en este pequeño corazón son imborrables. Juntos pasamos unas fantásticas navidades, las mejores me atrevería a apostar. Compartimos por primera vez nuestra nochevieja, reímos mientras jugábamos al parchís y yo cantaba a grito pelado al son del karaoke, celebramos nuestro aniversario de la forma más romántica y bonita de la que fuimos capaz, compartimos meriendas, en el Vips y el Nebraska. Sigo teniendo el muñequito que te tocó en el roscón de Reyes, y cada vez que lo miro me acuerdo de los felices que éramos los dos juntos, aquí, compartiendo mil y una tonterías. Porque no sabes lo que añoro agarrar tu mano al dormir, despertar con un tierno abrazo y un beso de buenos días... Tantas cosas echo ya de menos...
Aún así sigo sin darme por vencida, y ahora espero ansiosa el momento en el que pueda volver yo a tu casa para celebrar mi cumpleaños y, compartir así, nuevos y mágicos momentos que se nos quedarán grabados en el alma por siempre.
Siempre te querré. Siempre seré tuya.
Por siempre tu sirena...
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