Hoy cumplimos cinco años y un mes. Hoy, que ojalá pudiera estar a tu lado para celebrarlo juntos, ir a comer a un sitio romántico y mirarnos a los ojos mientras nos tomamos de la mano mientras esperamos la comida... Tal y como hicimos esta navidad en el Ginos.
No ha pasado ni un mes desde que te has ido, pero yo ya te echo más de menos que nunca. Deseando que se pase la espera para poder volver a verte... aunque sepa que aún queda un tiempo para poder hacerlo.
Pero hoy no debemos hablar de ello, hoy debemos hablar de nuestro día. Un nuevo mesnario junto a ti que me llena de ilusión y alegría. Porque cada día me levanto feliz de saber que tengo a alguien que me quiere, de que tengo a alguien a quien quiero más que a nadie en el mundo. Y que, pasara lo que pasara, no dejaría de hacerlo ni un sólo instante. Porque mi destino es estar contigo... No importa lo que tenga que esperar. Al final estaremos juntos y no habrá más despedidas, no habrá más llamadas por la noche, nos tendremos el uno al otro y viviremos nuestra propia historia, nuestra vida... juntos.
Te quiero, Fran. Y eso es lo único que importa. Te querré siempre, y siempre anhelaré el poder estar contigo...
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