Un dibujo antiguo, pero que significa mucho para nosotros. Un dibujo que marcó el inicio de la más preciosa de las relaciones hace ya casi siete años... Un amor que comenzó en un simple juego de rol interpretativo, que nos fue uniendo más y más a medida que hablábamos entre nosotros, que compartíamos gustos y que disfrutábamos de lo compatibles que éramos el uno con el otro.
Y aún a día de hoy, después de tanto tiempo, esa compatibilidad se sigue manteniendo. No consigo concebir una vida sin ti, alejada de tu presencia, y ahora mismo sólo puedo desear porque llegue el momento en el que podamos vivir juntos, sin una distancia que nos separe y sin fechas límites para disfrutar de tus abrazos y tus besos. Sólo quiero estar contigo, sólo pido eso, y por eso espero día a día porque al fin pueda hacerlo. Eres el amor de mi vida, siempre lo has sido y siempre lo serás. Nunca cambies, nunca dejes de ser el niño tontito, gracioso, romántico y feliz cuyos brazos me hacen sentirme protegida. Nunca dejes de ser mi ángel. Nunca dejes de ser la luz que ilumine mi aterradora oscuridad. Nunca dejes de ser tú, en definitiva.
Porque yo no lo haré.
Te amo, Fran.
Siempre juntos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario