Gracias. Gracias por estar ahí en los momentos más difíciles. Puede que no estés físicamente como me gustaría, pero el solo escuchar tu voz, el ver tu cara a través de la pantalla, me da fuerzas para continuar adelante y seguir luchando.
No sé cómo habría pasado estos días tan duros si no hubiese sido por tu presencia. Mi corazón se rompió en mil pedacitos de sólo imaginar que no podría cumplir pronto mi sueño de estar contigo. La luz sigue estando ahí, muy débil, pero sigue estando. No quiero volver a ilusionarme para llevarme un nuevo bofetón, pero al mismo tiempo una pequeña parte dentro de mí se revela y sigue albergando esperanzas como una niña tonta. Quizás eso es lo que evita que me termine de romper del todo. Quizás por esa parte consigo sonreír hoy... Pero si me dan la negativa al final... necesitaré emborracharme de tu voz para no derrumbarme del todo.
Te necesito. Te necesito como el aire que respiro. Eres lo más importante de mi vida, y ahora más que nunca quiero estar contigo. Quiero vencer de una vez a la distancia y poder vivir una vida de pareja normal contigo. Pero eso no significa que te vaya a dejar nunca.
Ya te lo he dicho: eres lo más importante de mi vida. Dejarte sería condenarme a mí misma...
Te quiero. Brindemos por esa débil estrella que aún brilla en el cielo.